Siempre recuerdo cuando niño conocí la historia de Aladino, estaba fascinado por encontrar una lámpara maravillosa de la que surja un genio capaz de concederme algún deseo.

Prácticamente la mayoría del tiempo vivía con esa emoción, ese entusiasmo y esa esperanza de que la alfombra de mi madre se elevara por los aires y me transportara a ese mundo imaginario donde mis deseos se hicieran realidad. Esa era mi intención… Como adulto sabemos que no existen lámparas ni genios tales, lo que eso deja al deseo encerrado en el interior de cada quien.

Pero… ¿Qué pasaría si los deseos pudieran hacerse realidad?

¿Cuál sería tu necesidad en el nivel más profundo y básico?

¿Qué desearías para ti?

Todo lo que ocurre en el universo se origina con la intención

Hoy mi intención es ayudarte a que tus deseos se hagan realidad, porque inmanente en toda intención y en todo deseo está el mecanismo para su realización… despertar tu potencialidad es conocer el camino y la intención y el deseo en el campo de la potencialidad pura tienen un infinito poder organizador.

Cuando introducimos una intención en el suelo fértil de la potencialidad pura, ponemos a trabajar para nosotros ese infinito poder

De hecho si no fuera por la intención, la realidad física no existiría

No sé si encontrarás una lámpara del cual salga un genio… pero agarra tu alfombra… y atrévete a volar!

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